El asma es una de las enfermedades más comunes en nuestra sociedad actual y requiere de farmacología. Es una enfermedad crónica de las vías respiratorias caracterizada por la inflamación y el estrechamiento de las vías respiratorias. Entre los síntomas del asma incluyen dificultad para respirar, tos y sibilancias.

Al ser una enfermedad que afecta a las vías respiratorias, las personas no tienen muy claro si es buena idea salir a correr por si se agravan los síntomas. Por lo tanto, ¿es buena idea salir a correr teniendo asma?

Son muchos los estudios que han querido analizar si el ejercicio cardiovascular puede tener más beneficios que contras en personas con esta patología, y se puede decir de forma fehaciente que salir a correr no solo es buena idea, sino que puede mejorar la sintomatología del asma.

Los estudios que mayor información nos pueden dar son las revisiones sistemáticas y metanálisis, por lo que hemos querido buscar información sobre este tema en una de ellas.

Esta revisión sistemática y metanálisis quiso investigar el efecto que tenía el ejercicio aeróbico en pacientes con asma. Este estudio recopiló aquellos estudios que comparaban intervenciones con entrenamiento aeróbico y sin intervención con el fin de observar si el ejercicio aeróbico tenía beneficios, era neutral o, por otro lado, podía llegar a ser perjudicial.

Los participantes de los estudios eran personas mayores de 18 años que tenían asma y el entrenamiento físico incluía ejercicio aeróbico realizado al menos dos veces por semana durante 8 o más semanas, según lo definido por las pautas del American College of Sports Medicine.

Entre los ejercicios cardiovasculares, además de correr, se incluían otros como andar, nadar, ir bici... por lo que es un estudio muy completo que no solo observa correr, sino también otros deportes que influyen y generan un estrés sobre las vías respiratorias. Esto es muy beneficioso porque normalmente, una persona que sale a correr, suele acompañar ese deporte con otros como pueden ser la natación o la bici. De hecho, hay competiciones, como los triatlones, que combinan estos deportes.

La conclusión de esta revisión y metanálisis mostraba que el ejercicio aeróbico tiene un gran efecto beneficioso sobre el control del asma y la función pulmonar, pero ningún efecto sobre los marcadores de inflamación local de las vías respiratorias (esto significa que no había ni beneficios ni perjuicios).

A pesar de esto, los propios autores del estudio piden tomar esta información con cautela ya que la medicación, a no ser que diga otra cosa el médico, se ha de seguir tomando pese a los muy probables beneficios que tiene salir a correr.

También se pide que estos resultados no se extrapolen a los niños porque el asma suele diferir entre los distintos grupos de población.

Precauciones que hemos de seguir cuando salgamos a correr

Lleva siempre contigo la medicación

A pesar de que se hayan mostrado beneficios en personas con asma, con este tipo de información suele haber una equivocación. Que una intervención pueda ayudar a un grupo de población, no significa que a nivel individual tenga que ser beneficioso sí o sí.

Es decir, imaginemos que de 100 personas con asma se realiza un estudio en el que se concluye que hay beneficios, pero los beneficios los reportan 90 personas. ¿Qué ocurre con las otras 10? Puede ser que esas 10 personas no tengan buenos resultados e, incluso, reporten problemas.

También hay que tener en cuenta que en ciertas zonas, el polen, el polvo, etc. pueden causar problemas aunque el ejercicio en sí pueda beneficiar. Por ello, no te confíes nunca y siempre lleva la medicación contigo.

Calienta antes de salir a correr

El calentamiento es imprescindible no solo para que no exista una lesión a nivel muscular, tendinosa, articular... sino también para que los pulmones se vayan adaptando al entrenamiento.

Puede ocurrir que si sales a correr sin un calentamiento previo puedas tener un ataque de asma, por lo que siempre que vayas a hacer algo, recuerda hacerlo siempre por tu salud.

Corre siempre que puedas después de llover

Como se ha comentado anteriormente, el polvo y polen es algo que puede generar ataques de asma y, justamente lo que hace la lluvia es limpiar el ambiente de esas partículas que pueden dañar la salud de las personas con asma.

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