El curioso caso de la ameba que explicaría de dónde venimos
3:19 a.m.Ya os hemos hablado en muchas ocasiones de la capacidad de las amebas para, literalmente, crecerse ante las adversidades.
Y es que, aunque son microorganismos unicelulares, son capaces de agruparse como si fuesen pluricelulares cuando las condiciones son desfavorables, algo que las ha convertido en seres muy interesantes para los científicos a lo largo de los años.
Sin embargo, el caso concreto de una de estas amebas pasó desapercibido hasta que recientemente un grupo de científicos ha desempolvado su genoma, descubriendo que podría estar implicada en el origen de la pluricelularidad que dio lugar a todo tipo de animales, entre ellos nosotros mismos.
Capsaspora owkzarzaki, la ameba de nombre endiablado responsable del origen de los organismos pluricelulares
Esta ameba fue descubierta hace más de una década, cuando un grupo de investigadores se encontraba en Puerto Rico estudiando el parásito de las esquistosomiasis. Se conoce que este parásito puede infectar a algunos moluscos, como los caracoles, por lo que fue precisamente analizando la hemolinfa de uno de estos animales cuando, además del parásito en cuestión, encontraron un curioso microorganismo que no había sido registrado hasta el momento.
Pronto descubrieron que se trataba de una ameba, a la que llamaron Capsaspora owkzarzaki. Se guardaron algunos ejemplares en un banco de células vivas de Estados Unidos y se publicó un paper sobre el descubrimiento, pero no se le prestó mayor atención.
Las amebas y su secreta relación con tu sistema inmune
¿Nuestro sistema inmune procede de los protozoos? Algunos científicos creen que existe una gran relación entre amebas y sistema inmune.
Sin embargo, dos años después otros investigadores decidieron desempolvar la historia, como si de detectives ávidos de casos abiertos se tratara.
En este caso optaron por secuenciar a fondo su genoma, de modo que pudieron descubrir que entre su material genético se encontraban algunos genes exclusivos de los animales cuya función reside en la regulación de la diferenciación celular y los procesos de comunicación y adhesión entre células.
¿Por qué se asocian estas amebas con el origen de los organismos pluricelulares?
Los procesos que acabo de mencionar son esenciales en la diferenciación de los tejidos que acaban generando los órganos en los animales.
Además, al microscopio se puede observar que estas amebas también poseen filopodios, una especie de “patas” que les permite vagar en solitario hasta que comienza una segunda fase en la que pierden estas patas y entran en un estado de inactivación similar a la hibernación generada por las condiciones desfavorables. Sin embargo, después poseen una tercera etapa en la cual despliegan de nuevo sus extremidades, entrelazándolas con las de otras amebas para poder generar una especie de organismo pluricelular.
Por otro lado, como han contado recientemente en un estudio publicado en la revista Cell, poseen dos genes concretos que dan más pistas sobre nuestro posible parentesco.
El protozoo gigante que se disfraza de esponja carnívora
Hoy os hablamos de Spiculosiphon oceana, que tiene la curiosa costumbre de disfrazarse de esponja carnívora.
El primero, llamado Brachyury, es un factor de transcripción que en animales se activa en las células embrionarias dándoles la posibilidad de reordenarse para dar lugar a los órganos. Aunque esto no ocurre en el caso de las amebas, también lo usan para moverse, por lo que la relación es clara.
El segundo, bautizado como Myc, favorece la proliferación celular de las amebas y, además, en humanos cuando está mutado favorece la división descontrolada de células cancerosas.
El moho que demuestra que se puede aprender sin tener cerebro
Un grupo de científicos ha descubierto un moho que puede aprender nuevos hábitos a pesar de no tener cerebro.
Estos científicos no pueden afirmar con total seguridad que Capsaspora sea el primer eslabón de la cadena que dio lugar a la aparición de organismos pluricelulares; pero sí que consideran que es una buena candidata. Eso es indiscutible.
La entrada El curioso caso de la ameba que explicaría de dónde venimos aparece primero en Omicrono.

0 comments