Beber leche está siendo algo polémico durante los últimos años. De hecho, hace unos días analizamos los pros y contras de seguir bebiendo leche durante la edad adulta, pues algunos individuos esgrimen como argumento que “la leche sólo debería tomarse durante la infancia“, y al pasar a la edad adulta ya no sería necesario. Esto se debería a que damos por hecho que el calcio y vitaminas procedentes de la leche podemos obtenerlos mediante otros alimentos al crecer, y por tanto ya no es imprescindible. La realidad es que hasta el momento creíamos que la leche tan solo nos proporcionaba beneficios a nivel de huesos y músculos (sistema musculoesquelético), pero una nueva investigación añade algo más: Beber leche también beneficia a tu cerebro.

Beber leche aumenta los niveles de glutatión cerebral

Así lo afirma una nueva investigación a cargo del Centro Médico de la Universidad de Kansas, publicada recientemente en la revista The American Journal of Clinical Nutrition, en la cual afirman que existe una correlación significativa entre el consumo de leche por parte de adultos mayores sanos y los niveles de glutatión, un antioxidante natural.

Como comentan Young Choi y Debra Sullivan, de la Universidad de Kansas:

“Durante mucho tiempo hemos pensado que la leche era muy importante para huesos y músculos. Este estudio sugiere que podría ser importante para el cerebro”

Para el estudio, Choi y su equipo pidieron a 60 voluntarios datos sobre sus respectivas dietas durante los días previos a las exploraciones cerebrales, donde se analizaron los niveles de glutatión cerebral mediante resonancia magnética de alta tecnología. Resultó que aquellos participantes que afirmaban beber leche tenían un nivel de glutatión más elevado en sus cerebros, una sustancia antioxidante natural que puede proteger al cerebro de los compuestos químicos reactivos producidos durante el proceso metabólico normal, y que se reconoce como causante o asociado a enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer o el Parkinson, por lo que la protección del glutatión podría ayudar en la prevención de dichas enfermedades.

“Básicamente, podemos pensar en este daño como cuando se acumula óxido en un coche. Si lo dejamos así durante mucho tiempo, se seguirá acumulando, dando lugar a daños y perjuicios mayores. Si podemos encontrar una manera de luchar contra esta acumulación de reactantes oxidativos mediante el estilo de vida, como la dieta o el ejercicio, podríamos obtener grandes beneficios para la salud de nuestro cerebro.

Los antioxidantes son un sistema integrado de defensa de nuestro organismo que lucha contra este daño, y los niveles de estos antioxidantes pueden regularse por diversos factores, disminuir o aumentar, a causa de enfermedades o por cambios en el estilo de vida”

Como objetivos futuros, el equipo de la Universidad de Kansas ya se ha planteado llevar a cabo un ensayo clínico aleatorio y controlado para determinar el efecto específico que tiene el hecho de beber leche a nivel cerebral, un paso lógico a partir de los datos que tenemos ahora.

Vía | News Medical.

Fuente | The American Journal of Clinical Nutrition.

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