Desde que en diciembre de 2019 apareció primera vez en la ciudad China de Wuahm, el coronavirus COVID-19 se ha ido extendiendo por diferentes países, llegando a España en febrero de este año. En los últimos días hemos ido conociendo las primeras medidas de seguridad y contención que se están tomando tanto en nuestro país como en los países vecinos.

Así, se han cancelado las maratones de Roma, de París y, hasta el momento, de Barcelona. También hemos sabido que en Italia se cierran se han expuesto medidas de aislamiento para todo el país, mientras que Irlanda ha cancelado las celebraciones de San Patricio y, en España, Madrid cerrará los colegios y universidades a partir de mañana, así como recomienda el teletrabajo.

También en Francia se prohíben las aglomeraciones de más de 1.000 personas y, en general, se recomienda mantener una distancia de seguridad de un metro entre personas, así como lavarnos las manos a menudo, intentar tocarnos la cara lo menos posible y evitar tener contacto con otras personas si tenemos síntomas asociados a la enfermedad.

En cuanto a las medidas con respecto a lugares frecuentados por muchas personas, Italia comenzó cerrando gimnasios, piscinas, museos, saunas, etc. en la zona de Lombardia y ahora se aplicará la medida a todo el país hasta el 3 de abril. En nuestro país todavía no se ha dado indicaciones con respecto a esto pero, ¿qué hacemos mientras tanto con los gimnasios? ¿Entrenamos directamente en casa o seguimos yendo hasta nuevo aviso?

Prestar más atención a la higiene del material

Lo primero es, como en todos los casos, que mantengamos la calma y no nos dejemos llevar por los bulos o las informaciones catastrofistas que recibimos. Lo primero es tener en cuenta que no existen evidencias de que el virus pueda contagiarse por medio del sudor. En general - aunque todavía no queda claro la manera exacta en la que se transmite - parece haber consenso en que sería través de secreciones al estornudar o toser y que podrían infectar a otras personas si entran en contacto con sus ojos, su nariz o su boca.

¿Pero qué pasa con los objetos? Es decir, ¿tendríamos que preocuparnos por el contacto con el material y las maquinas del gimnasio? En otros coronavirus - recordemos que existen diferentes tipos de coronavirus - se sabe que los virus podrían sobrevivir en objetos metálicos o plásticos algunos días. En cualquier caso, se eliminarían de manera sencilla con una limpieza y desinfección del material. En cualquier caso, la OMS considera que el riesgo de infectarnos por medio de objetos es bajo.

Qué podemos hacer nosotros

La clave está en la limpieza y en las medidas que nosotros tomemos. Si acudimos al gimnasio, es recomendable que nos aseguremos de que en la limpieza se utilizan agentes desinfectantes y que la limpieza se hace de manera habitual.

Antes de utilizar una máquina podemos utilizar nuestras propias toallitas desinfectantes. La CDC (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades) recomienda el uso de productos comunes de limpieza de uso doméstico en rociador o toallitas.

Además, y como en todos los casos, es extremadamente importante que nos limpiemos bien las manos después de utilizar el material del gimnasio y que en todo el tiempo entre su uso y el lavado de manos, evitemos tocarnos la cara en la medida de lo posible. Nuestras medidas higiénicas serán las principales protectoras.

Por supuesto, es responsabilidad nuestra no acudir a lugares públicos si tenemos síntomas que pueden estar asociados con la enfermedad o creemos que tenemos riesgo de haber sido infectados.

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La noticia Gimnasio y coronavirus: qué medidas de precaución tenemos que tomar fue publicada originalmente en Vitónica por Iria Reguera .

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