Es importante saber que las hormonas y neurotransmisores juegan un papel fundamental en el equilibrio de nuestro cuerpo, de manera que si queremos llevar un estilo de vida saludable debemos prestarle mucha atención a cómo se comportan, ya que pueden beneficiarnos o perjudicarnos.

Una de las  principales afectadas en situaciones de estrés, angustia y malos hábitos alimenticios es la serotonina, un neurotransmisor que se libera luego de consumir carbohidratos, azúcares y almidones. Este neurotransmisor, que se produce a partir de un aminoácido llamado triptófano, incrementa la sensación de calma, mejora el estado de ánimo y reduce la depresión.

Generalmente, cuando estamos estresados los niveles de serotonina bajan porque se eleva el cortisol y este la inhibe. Es por esto que en situaciones de estrés y depresión tendemos a consumir más carbohidratos o azúcares, porque nuestro cuerpo, que es muy inteligente, sabe que los niveles de serotonina se elevarán.

El cortisol, también llamado “hormona del estrés”, es segregado en situaciones de angustia, y su aumento disminuye la producción de serotonina, al tiempo que eleva los niveles de insulina, lo que estimula la acumulación de grasa abdominal.

Otra hormona que también participa es la grelina, que cuando está elevada incrementa notablemente el apetito.

Ahora, ¿qué debes hacer para mantener el equilibrio?

-Lo primero es organizar y vigilar tus patrones de conducta alimentaria. Cuando no comes o te saltas comidas, los niveles de grelina aumentan, lo que incrementa tu apetito y hace que tu metabolismo sea más lento. También, tus niveles de hormona tiroidea disminuyen y eres más propenso a acumular grasa. Los niveles de serotonina disminuyen al igual que la glucosa en sangre, lo que traerá como consecuencia una ansiedad desmedida por el dulce.

-Come proteína cinco veces al día, así controlarás la glicemia y la ansiedad, y además las fuentes de proteína animal te ayudarán a elevar los niveles de triptófano, precursor de la serotonina.

-¡Muévete! Hacer ejercicio eleva las endorfinas, lo que produce bienestar y placer. ¡La actividad física es el mejor antidepresivo natural! Además, ¡te ayuda a comer mejor!

-Puedes suplementar con picolinato de cromo, el cual es un mineral que ayuda a disminuir la ansiedad por los carbohidratos y el dulce, ayuda a bajar los niveles de glucosa en sangre, lo que permite mantener controlados los niveles de insulina, de manera que al haber menos apetito habrá también menos grasa acumulada. La dosis promedio es de 200 mcg 20 o 30 minutos antes de la comida, y no más de 600 mcg al día. Consulta con tu médico.

-Duerme al menos 7 horas diarias. La falta de sueño eleva la grelina y el cortisol, lo que hace que el metabolismo sea más lento, produce más apetito y hace que acumules más y más grasa.

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Publicado originalmente en el sitio Web de Sascha Fitness.