Uno de los factores más importantes en el embarazo, es la dieta; muchas personas creen que el consumo de papaya no es seguro, porque provoca un aborto en el embarazo, a pesar de que aporta importantes nutrientes.

La papaya es una fruta tropical, ampliamente cultivada, que posee beneficios, pero también puede resultar perjudicial en el embarazo. Entre los beneficios destacan:

– Contrarresta el problema de la indigestión, debido a la presencia de una enzima llamada papaína.

– Es de gran ayuda en el estreñimiento y muy eficaz para aliviar la acidez estomacal en el embarazo.

– Sus valores nutritivos, son requeridos por el cuerpo durante esta etapa, como la vitamina A, B1, B2, B3, B6, B9, C y minerales como el calcio, hierro, magnesio, potasio y sodio; así como pectina, papaina y licopeno.

El consumo de papaya en el embarazo, supone los siguientes problemas:

– La variedad de esta fruta no madura, contiene altas concentraciones de una sustancia similar al látex y sus componentes: papaína y quimopapaína tienden a causar anormalidades en el crecimiento y desarrollo fisiológico y son abortivos.

– La sustancia similar al látex también puede causar edema; así como hemorragia y sangrado del borde de la placenta; complicaciones graves durante el período fértil y parto prematuro.

– El látex también puede dar lugar a irritaciones y reacciones alérgicas en algunas personas.

– Las semillas, hojas y fruta contienen carpaine, un tipo de medicamento natural que mata a los parásitos; sin embargo, la dosis puede ser peligrosa si se toma en grandes cantidades y las semillas pueden tener un efecto anticonceptivo en el cuerpo si se toma en grandes dosis durante este período.

– Si consume esta fruta en exceso, entonces puedes sufrir de carotenemia o el color amarillo de palmas y plantas.

– Las papayas  verdes pueden causar contracciones uterinas y aborto involuntario.

Los abortos espontáneos,  partos prematuros y complicaciones en los partos, suceden cuando se come la fruta verde  en grandes cantidades. La papaya madura tiene un bajo porcentaje de látex y en pequeñas cantidades  no causará ningún problema a las mujeres embarazadas, siempre bajo la supervisión del médico.