Admítelo, más de una vez te has arropado (me incluyo) con excusas para evitar hacer eso que sabes es necesario, para cada excusa siempre hay una alternativa sólo necesitas abrir la mente y ser creativo.

1. “No tengo tiempo para hacer ejercicio”

Si lo tienes, ¡si tienes tiempo de navegar en redes sociales o ver tv, tienes tiempo de hacer ejercicio! Lo que pasa es que no quieres salirte de tu zona de comodidad, una hora representa el 4% de tu día. Organízate, puedes levantarte una hora más temprano de lo normal y hacer ejercicio en ese momento, buscar un espacio al final de la tarde para ir al gym o en el medio día. Puedes hacer ejercicio en casa, con pliométricos, videos de insanity/zumba/P90X, saltar cuerda, subir y bajar escaleras.

2. “No tengo tiempo para cocinar”

Busca dos días a la semana para cocinar en bulto, organiza tus comidas la noche anterior, ten verduras lavadas y picadas, lechuga, pepino, tomate, cocina brócoli, vainitas/habichuelas tenlos en envases en la nevera, arroz integral o quinoa ya cocidas , hierve varias pechugas y desmenuzalas, ten a la mano meriendas saludables como nueces y manzanas/mandarinas, proteína en polvo etc. La organización es clave.

3. “La comida sana es costosa”

Depende de cómo lo veas, pero te aclaro que las enfermedades, tratamientos y medicamentos para la presión arterial, insulina, síndrome metabólico son aún más costosos. Es cuestión de prioridades, ahorra en ciertas cosas para invertir un poco más en alimentos, ¡es SALUD! Y no te dejes llevar tanto por los productos procesados importados, si el 85% de tu dieta está compuesto por alimentos naturales tienes opciones económicas. Aprende a sustituir, en lugar de quinoa consume arroz integral o lentejas, en lugar de salmón consume un pescado blanco más económico o sardinas en aceite de oliva y escurre el aceite, en lugar de almendras compra maní, llena la nevera de verduras y vegetales, frutas, son más económicos y es lo que más necesita tu cuerpo, arroz integral,semillas, leguminosas, batata, plátano, huevo y pollo. Otras cosas costosas de las que no se quejan son las chucherías, bebidas alcohólicas, comidas en la calle, cigarrillos, etc. ¡Prioridades!

4. “Paso mucha hambre y no quedo satisfecho comiendo sano”

Si te sientes cansado y con hambre entonces no estás comiendo bien, la idea es comer mejor, no comer menos, si comes cinco veces al día, porciones moderadas incluyendo proteína, muchos vegetales, fibra en la mayoría de tus comidas, consumes dos o tres porciones de grasas buenas, carbohidrato complejo en el día, de buena calidad, no tienes porque sentir hambre. Analiza objetivamente lo que estás haciendo y si está en tus posibilidades asiste con un especialista que te guíe y corrija lo que estás haciendo mal.

5. Estoy muy cansado para hacer ejercicio.

Hacer ejercicio no quita energía, al contrario, aumenta la oxigenación y circulación y eso incrementa niveles de energía, además liberas endorfinas y te sientes mucho mejor. Hacer ejercicio es uno de los mejores antidepresivos y te ayudará a dormir muchísimo mejor.

El truco está en formar hábitos poco a poco, en ver el vaso medio lleno en lugar de medio vacío, ¡en SALIRTE DE TU ZONA DE COMODIDAD! Porque es ALLÍ donde sucede la magia. Trabaja en mejorar tu disciplina, en hacer lo que debes aún cuando no tienes muchas ganas, se constante y determinado, ¡no hay excusas cuando tienes el objetivo claro y tienes las ganas de alcanzarlo!

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