Después de las vacaciones o simplemente tras un fin de semana especialmente “movidito” podemos llegar a sentirnos más lentos, cansados e incluso irritables. La razón de estas anomalías es la acumulación de toxinas de nuestro organismo, sobre todo si tras estos días distanciados de nuestra rutina general hemos dado rienda suelta a una mala alimentación, sustancias nocivas o a la falta de sueño. Si este es tu caso lo único que tienes que hacer es depurarte, es decir, expulsar de tu organismo todas estas toxinas que has acumulado en tu cuerpo.

Además de llevar a cabo una buena alimentación en la que no deben faltar fruta y vegetales, la clave fundamental para depurar nuestro organismo consiste en beber agua. Se estima que lo ideal es beber dos litros de agua al día. Seguramente no estás acostumbrado a beber tanta cantidad de agua, pero tienes que pensar que el agua es el desintoxicante por excelencia y es de vital importancia para librarnos a través de la orina de sustancias que acumula el organismo y que pueden afectar a nuestra salud.Si te cuesta mucho beber agua puedes aumentar tu ingesta de líquidos tomando Té verde por sus propiedades antioxidantes que estimulan un correcto funcionamiento del hígado.
Otro truco es poner unas gotitas de limón a nuestra agua, lo que favorecerá la limpieza de nuestro organismo además de darle algo de sabor. Por último es muy importante eliminar toxinas a través del ejercicio físico que aumenta la producción de sudor y que además nos servirá para sentirnos mejor.