La sinefrina es un componente de la naranja que se utiliza en los productos adelgazantes al contar con un efecto termogénico cuando se consume en altas dosis. Tras la retirada de algunos productos quemagrasa por no considerarse adecuados sus componentes, la sinefrina es uno de los más populares que ha quedado.
El problema es que todavía no hay pruebas científicas que avalen su poder lipolítico, y las que hay hoy en día solo atribuyen un poder quemagrasa del 4%, lo que supone una pérdida de un kilo cada seis meses, algo más bien ridículo.

Sin embargo si hay pruebas que atestiguan de los prejuicios de tomar este tipo de sustancias en cócteles quemagrasas, ya que casi nunca se toma la sustancia pura tal cual, sino que se suele mezclar con otros estimulantes para potenciar su efecto, estimulantes como la cafeína, teína, teobromina, teofilina o taurina.
El uso asociado de tales elementos estimulantes puede dar lugar a taquicardias, hipertensión e incluso se han dado caso de arritmias. Y como estas sustancias hacen que todo se acelere de manera poco natural puede haber trastornos en la absorción intestinal y en la diuresis.

No vale la pena arriesgar nuestra salud por peder nada de peso esperando el efecto milagro. Todavía no han sacado la pastilla que pierda peso de manera sana, eficaz y sin efectos secundarios, hasta entonces nos conformaremos con cuidar la dieta y hacer deporte, que eso seguro que funciona y encima nos proporciona bastantes más beneficios.